Madriz: Aguirre, The Greatest Hits

ECHAMOS LA VISTA ATRÁS PARA RESCATAR ALGUNAS DE LAS PERLAS MEDIÁTICAS QUE NOS HA DEJADO NUESTRA LIDERESA. PESE A TODO, LA ECHAREMOS DE MENOS.

 

El inesperado adiós de la Presidenta de Madrid es, sin duda, la noticia de la semana.Una política radical, magnética y con una capacidad inimitable para causar pasión y odio desmesurados. Ahora que ya no podremos disfrutar de sus barrabasadas, salidas de tono y momentos estelares, toca rendir homenaje a la noble que trajo a su partido, a la oposición y a los ciudadanos de cabeza. Con todos ustedes, los mejores momentos de doña Esperanza Aguirre y Gil de Biedma, condesa de Murillo y Grande de España.

Sobreviviendo al desastre

A pesar de no haber aclarado del todo las razones de su abandono, Aguirre ha confesado que el cáncer que le fue detectado en 2011 tiene algo que ver. Sin embargo, la vida siempre le ha sonreído a la lideresa, que ha sobrevivido a eventos de lo más pintorescos. En 2005, se disponía a ver Móstoles desde el aire acompañada del entonces líder de la oposición, Mariano Rajoy, el alcalde de Móstoles y un cámara de Antena 3. El despegue desde la plaza de toros de la localidad madrileña fue algo aparatoso y el helicóptero cayó sin causar grandes daños. Lo llamativo de todo es que los tres señores que iban con ellos tuvieron que ser hospitalizados con algunas lesiones leves (Rajoy se rompió un dedo y sufrió una luxación en otro), mientras que Esperanza salía por su propio pie afirmando estar “perfectamente”. La fama de mujer de acero aumentó varios peldaños tres años más tarde en un viaje oficial con una delegación de empresarios madrileños a La India. Cuando estaban haciendo el registro en el hotel, les sorprendió un tiroteo que formaba parte de un ataque terrorista coordinado que terminó con 100 muertos y más de 200 heridos. Entre ellos no se encontraba, por supuesto, Aguirre.

Eres lo que vistes

Una de las marcas de identidad de la ex Presidenta es, sin duda, su estilo libre a la hora de elegir estilismos. En la rueda de prensa que dio para explicar el incidente en La India, se presentó con unos tacones con calcetines que casi se llevan toda la atención de la prensa. Otro de sus outfits más recordados es el que le hizo Agatha Ruiz de la Prada para asistir a los Premios T de Telva. Más chovinista que ninguna, se enfundó un imposible vestido inspirado en la bandera de la Comunidad de Madrid, con sus estrellas y todo. Flashes y expectación máxima. Suya es la frase “yo no hago declaraciones en zapatos planos”. Atención al vídeo, donde Lucía Figar, consejera de educación, se descojona de Aguirre a sus espaldas.

 

¡Esa boca, Presidenta!

El micrófono abierto es prácticamente un género periodístico. A Aguirre, gran conocedora del poder de los medios, le ha perseguido la sombra de saber perfectamente cuándo un micro está abierto y cuándo no, y nos ha dejado muchos momentos impagables. Alberto Ruiz-Gallardón y ella son lo que un americano llamaría frienemies (friend+enemies), ya que están condenados a entenderse pero no se pueden ni ver. Esto quedó grabado para la posteridad cuando se refirió a él como “el hijoputa”, vanagloriándose de haberle arrebatado un consejero de Caja Madrid que finalmente fue concedido a Izquierda Unida. Antes al otro extremo político que al enemigo en casa. Con Gallardón siempre estaba muy suelta, y otro micro traidor captó cómo le espetaba al actual ministro de Justicia que la Comunidad “no tenía un puto duro”. Algo parecido a su salida del tiesto al afirmar que le costaba llegar a fin de mes, dicho por alguien que vive en un palacio y que cobra, tras sus propios recortes, cerca de 6.000 euros limpios al mes. No hay que irse muy atrás para ver a la verdadera Esperanza Aguirre. En su visita a Valquemada y Robledo de Chavela tras los terribles incendios de este verano, se filtró un vídeo en el que Aguirre cargaba contra los arquitectos. No contra un estudio, o un arquitecto en concreto, sino contra el gremio entero, soltando perlas tremendas. En la más fuerte de todas afirmaba que habría que aplicar la pena de muerte a los arquitectos, porque son los únicos cuyos crímenes sobreviven a su propia vida. Pidió disculpas, por supuesto, pero la naturalidad con la que se expresa hiela la sangre. También se enfrentó a un grupo de sanitarios que se manifestaban en un hospital mientras mascaba chicle, al más puro estilo chula de barrio, a los que les espetó que estaban pagados para meter follón.

Yes, I do

Hay que reconocerle un mérito, y es su empeño por una educación bilingüe y su más que sobrada fluidez en lengua inglesa, característica de la que carece la gran mayoría de políticos de este país, y más de su edad. Aunque reconoce que está algo oxidada, todavía quedan resquicios de algo parecido a un acento británico. Mítica es su aparición en el canal para aprender inglés Vaughan TV. También dio unaclase magistral de inglés en un colegio de Vallecas con una cobertura de reverencia en TeleMadrid. Algo más psicotrópico fue su arranque en catalán durante un discurso,entre risas de lo más ofensivas.

Inauguraciones y apariciones públicas

El Metro es una de las obras a las que el PP madrileño hace referencia siempre que se le ataca. Una de las últimas ampliaciones fue el metro ligero, un tranvía que unía la ciudad con varias localidades de la región. Esperanza Aguirre se presentó orgullosa en la inauguración y, poco habituada al transporte público, comenzó a criticar el ruido que hacía el cacharro y las puertas chirriantes. La presidenta quedó espantada y llegó a decir frases como “este ruido me lo quitáis” o “estas puertas necesitan 3 en 1”. Otra gran inauguración, por lo poco habitual, fue la del Mercadona del Barrio de Salamanca. Esperanza Aguirre y Ana Botella se presentaron en el único Mercadona al que entrarían en su vida y aprovecharon para llevarse unas cositas Hacendado, para experimentar por un día lo mismo que su servicio.

Contra todos

Su relación con la prensa no afín a su partido es más bien tensa, aunque Espe siempre ha sabido salir airosa de las encerronas. En su etapa como Ministra de Educación y Cultura vivió una especie de romance mediático con Pablo Carbonell, entonces reportero de Caiga Quien Caiga, que comenzó con enfados al principio pero entrando al juego al final. De aquella época es su confusión entre Saramago y un personaje inventado por ella misma llamado Sara Mago, o reconocer que no sabía quién era Santiago Segura tras el pelotazo de Torrente. Con La Sexta también ha tenido sus más y sus menos, como era de esperar. Aunque su enfrentamiento más sonado no ha sido con la prensa, sino con el Rey, al que pidió clemencia para Jiménez Losantosdespués de que el periodista pidiera la abdicación del monarca. El Rey acabó perdiendo los nervios (según filtraciones en prensa), bastante molesto con ella.

 

 

El adiós de Esperanza Aguirre es una buena noticia para muchos, mala para sus votantes y todavía está por ver si para su partido, donde habrá quienes estén brindando. Pero lo que es innegable es que la ya ex lideresa de los madrileños era una mina de momentos divertidos, enervantes y sorprendentes.

 

Aquí

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Imagen de Twitter

Estás comentando usando tu cuenta de Twitter. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s

A %d blogueros les gusta esto: